Descripción
La espada de Simón Bolívar que posee el Estado venezolano es una pieza de incalculable valor histórico, pues fue forjada para el propio Libertador en Perú, y le fue entregada en sus manos en 1825.
También conocida como "la espada de Perú", impresiona su fina orfebrería no sólo en los detalles de la vaina de puro oro de 18 kilates que la cubre, sino también en el brillo que le dan las 1374 piedras preciosas (diamantes, esmeraldas y rubíes) que adornan su empuñadura.
A pesar de ser considerada una joya de profundo contenido simbólico que pertenece a todos los venezolanos -de hecho el Estado la compró y la conservaba en la bóveda del Banco Central de Venezuela- hoy la utiliza a conveniencia el presidente Hugo Chávez con fines político-partidistas con escaso recato.
Incluso, y cada vez con más frecuencia, en actos controversiales como la juramentación de jóvenes para la difusión y "defensa" del mensaje socialista que promueve su gobierno o en la conmemoración del aniversario del golpe de Estado que protagonizó el 4 de febrero de 1992.